– Ajuste de dulzura: Para aquellos que disfrutan de un toque de dulzura, consideren agregar un toque de miel o jarabe de arce a la salsa.
– Dale un toque picante: si lo que buscas es un toque picante, una pizca de chipotle en salsa de adobo o una pizca de hojuelas de chile le agregarán un toque picante agradable.
– Espesar la salsa: para espesar la salsa hasta que tenga una consistencia más parecida a la de una salsa, mezcle una cucharada de maicena con agua fría y revuélvala con los jugos. Cocine a fuego alto en la olla de cocción lenta durante 15 a 20 minutos más hasta lograr el espesor deseado.
Recuerde que la clave para una pechuga de res excelente es la paciencia. La carrera se gana con lentitud y constancia, ya que la carne adquiere sabores y una ternura que no se pueden apresurar. ¡Disfrute del proceso y, lo que es más importante, del festín que le espera!