Ácido bórico
Un producto disponible en las farmacias de cada esquina. El ácido penetra profundamente en los tejidos y elimina incluso las manchas viejas y rebeldes. Hacer lejía casera es muy sencillo: basta con coger unos sobres de ácido y disolverlos en diez litros de agua. Hay que esperar a que se disuelva por completo.
Por lo tanto, es necesario batir el agua durante mucho tiempo hasta que no se vean granos. Luego colocamos la ropa manchada en un recipiente con esta agua y esperamos. Pasadas unas horas las sacamos y las lavamos a máquina o a mano como de costumbre.
Detergente en polvo y solución de manganeso.
Debe llenar un balde con agua caliente y verter en él unos doscientos gramos de detergente en polvo. A continuación, debes disolver varios cristales de manganeso en una taza de agua vieja. El líquido debe volverse rosado. Hay que remover el agua durante un buen rato para que los cristales se disuelvan por completo. De lo contrario podrían dejar manchas en los objetos.
Luego vierta la solución de la taza en un recipiente con polvo y revuelva. Luego metemos los objetos blancos contaminados en un balde con el líquido preparado y lo tapamos con una bolsa. Esperamos a que el agua se enfríe y enjuagamos las cosas.
Estos dos métodos descritos anteriormente proporcionarán resultados óptimos a un costo mínimo.
Las cosas volverán a ponerse blancas, como si las hubieras comprado y nunca las hubieras usado.