Muslos de pollo plato verdaderamente irresistible.

Instrucciones:
Preparación: Empieza sazonando los muslos de pollo con sal y pimienta blanca. Asegúrate de que estén bien cubiertos para potenciar los sabores durante la cocción.

Saltear: En una sartén grande, calienta un generoso chorro de aceite de oliva a fuego medio. Añade la cebolla picada, el pimiento y el ajo. Saltea hasta que la cebolla se vuelva translúcida y los pimientos se ablanden, liberando su aroma.

Dorar el Pollo: Sube el fuego a medio-alto y añade los muslos de pollo a la sartén. Dóralos por cada lado hasta que desarrollen una corteza dorada, sellando los jugos y el sabor.

Cocinar con Vino: Una vez dorado el pollo, vierte el vaso de vino blanco. Deja que se cocine a fuego lento unos minutos para permitir que el alcohol se evapore, dejando un rico fondo de sabor.

Agregar Tomates y Caldo: Incorpora los tomates cortados en dados a la sartén, seguido de suficiente caldo de pollo para cubrir el pollo. Revuelve suavemente para combinar todos los ingredientes.

Cocinar a la Perfección: Reduce el fuego a bajo y tapa la sartén. Deja que el pollo se cocine lentamente durante unos 30 minutos, o hasta que esté completamente cocido y tierno.

Garnish: Una vez el pollo esté listo, espolvorea perejil fresco picado por encima para dar un toque de color y frescura.

Servir y Disfrutar: Sirve este magnífico plato caliente, idealmente con un acompañamiento de puré de papas cremoso o una ensalada simple para una comida balanceada.

Consejo Profesional: La clave de esta receta es la paciencia: permitir que el pollo se cocine lentamente en el caldo y el vino asegura que absorba todos los sabores, resultando en un plato verdaderamente irresistible.