6. Poncha la masa y vuelve a amasarla con fuerza. Córtala en 10 partes iguales.
7. Toma cada una de las partes y dales forma de bola. Posteriormente aplástala un poco y mete los contornos hacia el interior. Finalmente gira un poco la masa hacia el centro para que tome forma de bolillo. Puedes colocar un poco de harina sobre la mesa para facilitar el procedimiento. Colócalos en una charola forrada con papel encerado.
8. Espera un momento para que la masa duplique nuevamente su tamaño.
9. Con un cuchillo, realiza un corte de aproximadamente un centímetro de profundidad a lo largo del bolillo.
10. Calienta el horno a 250ºC e introduce la charola. En la parte inferior coloca otra charola con agua, este es el secreto para que tus bolillos sean perfectos. Hornea por 15 minutos o hasta que alcance el color deseado.