PREPARACIÓN:
Prepara el pan: prepara el horno a 175 °C (350 °F). Tuesta los cubos de pan en el horno durante 10 a 15 minutos o hasta que se doren y queden crujientes, esparciéndolos en una sola capa sobre una bandeja para hornear. Una vez que los saques del horno, déjalos enfriar por un momento.
Prepara la base del pudín: mezcla los huevos, la crema espesa, la leche entera, el azúcar granulada, la esencia de vainilla, la canela en polvo y la sal en un bol grande y bate hasta que se integren. Cubre los cubos de pan tostado de manera uniforme agregándolos al líquido y revolviendo para cubrirlos. Después de unos quince a veinte minutos, el pan debería haber absorbido todo el líquido de la mezcla de natillas.
Prepare el pudín: coloque la mezcla de pan y natillas en moldes individuales o en una fuente para horno de 23 x 33 cm. Después de usar una espátula para alisar la superficie, hornee el pudín durante 30 a 35 minutos en un horno precalentado o hasta que se asiente y la superficie esté dorada.
Mientras se hornea el pudín, prepare la cobertura de caramelo dorado. A fuego medio, disuelva el azúcar granulada en el agua en una cacerola mediana. Una vez que el azúcar se haya disuelto, vierta los demás ingredientes y lleve a ebullición a fuego alto, revolviendo de vez en cuando. Durante aproximadamente cinco a siete minutos, mientras gira la cacerola con regularidad, cocine el almíbar de azúcar hasta que adquiera un intenso tono caramelo.
Deja enfriar el caramelo: una vez que el caramelo haya alcanzado el color que deseas, retíralo del fuego e incorpora lentamente la mantequilla, la crema espesa y un poco de sal. La mezcla hervirá rápidamente, así que ten cuidado. Combina los ingredientes del caramelo y revuelve hasta que quede una mezcla homogénea.
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