Presentar y saborear: después de que el pudín se haya horneado durante el tiempo especificado, sáquelo y déjelo enfriar un poco. Deje que la salsa de caramelo dorada y tibia penetre en las grietas y recovecos del pudín rociándola por encima. Caliente el pudín y sírvalo tibio, cubriéndolo con salsa de caramelo adicional si lo desea.
Si bien el plato mencionado anteriormente es una versión tradicional del budín de pan con caramelo dorado, las posibilidades de adaptación son prácticamente ilimitadas. Algunas alternativas que se pueden considerar son las siguientes:
Experimente con distintos sabores como extracto de almendras, ron o ralladura de naranja para darle a la base del pudín un toque distintivo.
Agregue un poco de textura y sabor a su pudín cubriéndolo con nueces picadas como nueces pecanas o almendras antes de hornearlo.
Compota de frutas frescas: para equilibrar la espesa salsa de caramelo, sirva el pudín con un poco de compota de frutas o un poco de crema batida.
En resumen
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