- Precalentar el horno:
- Precaliente el horno a 375°F (190°C
- Engrase una fuente para hornear o una cazuela con mantequilla o aceite en aerosol antiadherente.
- Preparar las patatas:
- Pele las papas y córtelas en rodajas finas de aproximadamente 1/8 de pulgada de grosor. Una mandolina funciona bien para esta tarea para garantizar rebanadas uniformes.
- Coloque las patatas en capas:
- Coloque una capa de rodajas de papa en el fondo de la fuente para hornear preparada, superponiéndolas ligeramente unas sobre otras.
- Condimente la capa con una pizca de sal, pimienta y una pizca de tomillo seco.
- Espolvorear una porción del ajo picado sobre las patatas.
- Añade una capa de queso rallado encima de las patatas.
- Repetir las capas:
- Continúe colocando las papas, los condimentos, el ajo y el queso en capas hasta que se usen todas las papas. Asegúrese de guardar suficiente queso para la capa superior.
- Preparar la mezcla de crema:
- En una cacerola pequeña, caliente la crema espesa y la leche a fuego medio hasta que esté tibia pero sin llegar a hervir.
- Vierta la mezcla de crema tibia uniformemente sobre las papas en capas.
- Añadir mantequilla:
- Unta la parte superior de las patatas con pequeños trozos de mantequilla.
- Hornear las patatas:
- Cubre la fuente para hornear con papel aluminio y hornea en el horno precalentado durante 45 minutos.
- Después de 45 minutos, retira el papel aluminio y espolvorea el queso restante por encima.
- Continúe horneando sin tapar durante 15 a 20 minutos más, o hasta que las papas estén tiernas y la parte superior esté dorada y burbujeante.
- Atender:
- Sacar las patatas del horno y dejarlas enfriar unos minutos.
- Decorar con perejil recién picado.
- Sirva caliente como guarnición de su plato principal favorito.
Consejos:
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