- Pelar las patatas y cortarlas en cubos. Colocar en una olla con agua y cocinar hasta que estén suaves.
- Una vez listo, cuela y haz un puré. Agregamos la mantequilla y la leche y comenzamos a formar el puré. Tenemos que intentar pisar muy bien las patatas para que no queden grumos.
- Agrega el huevo y mezcla bien.
- Sazonamos con sal y pimienta y comenzamos a agregar la harina mientras mezclamos hasta integrar todo, esto quedará como la “masa” del pastel. Hemos reservado.
- Ahora comencemos con el relleno. Cortar la cebolla y el pimiento en dados pequeños y sofreírlos en una sartén con un poco de aceite.
- Cuando veamos que está dorado añadimos la zanahoria rallada y sazonamos con sal y pimienta. Mezcla bien y cocina por unos minutos hasta que la zanahoria se ablande y se dore. Hemos reservado.
- Cortar las setas en rodajas y sofreírlas en otra sartén con un poco de aceite. Sazone con sal y pimienta y cocine hasta que estén suaves. Una vez listo, retira del fuego y reserva.
- Ahora comencemos a armar el pastel. Cogemos un molde para tarta de unos 22 cm. Engrasamos el fondo y los laterales o también utilizamos papel vegetal.
- Cogemos el puré y lo vertemos sobre el molde. Repartimos muy bien el fondo y los laterales. Recuerda que esto es como la “masa” del bizcocho. Por eso, debemos tener cuidado a la hora de untar el puré.
- Pondremos la mitad de los champiñones en el fondo acomodándolos muy bien y formando una capa, luego agregaremos las cebollas y las zanahorias salteadas. Encima colocaremos los restos de las setas.
- Cubrir con papel de aluminio y llevar al horno precalentado a unos 180 °C durante unos 50 minutos.
- Antes de que se acabe el tiempo de cocción retiramos el papel de aluminio y espolvoreamos el queso por encima. Lo volvemos a meter al horno y esperamos a que esté gratinado. ¡Listo!
Debes probar este delicioso pastel, la consistencia de la base del pastel te sorprenderá, ¡este pastel será una explosión de sabor para nuestras papilas gustativas!
Consejos y sugerencias
- Cuando metamos el bizcocho al horno hay que taparlo con papel de aluminio, de lo contrario se quemará la superficie y le dará un sabor amargo a la preparación.
- Cuando cocinemos los champiñones debemos asegurarnos de que estén muy tiernos antes de apagar el fuego, de lo contrario quedarán insípidos y gomosos.
- Como ya hemos comentado, también podemos preparar otras variantes siguiendo la misma receta. Quizás podamos sustituir los champiñones por calabacín verde o pollo, ya veréis, quedará riquísimo.